Las siete iglesias - las siete iglesias del apocalipsis - apocalipsis - el Gran Arcano - la Magia Sexual - Devi-Kundalini - Kundalini - columna vertebral - pan de sabiduría - doctrina secreta - ocultismo - esoterismo - yoga - alma solar - alma lunar.
El hombre es una trinidad de Cuerpo, Alma y Espíritu. Entre el Espíritu y el cuerpo existe un mediador: el Alma. Los estudiantes de ocultismo observamos que el Alma está vestida con un traje maravilloso denominado Cuerpo Astral. Ya sabemos que el Astral es un doble organismo dotado de sublimes sentidos internos.
Los grandes clarividentes nos hablan de los siete chakras, el gran
teósofo y ocultista C.W. Leadbeater los describe con lujo de
detalles en varias de sus obras; estos chakras son realmente los
sentidos del Cuerpo Astral. Dichos centros magnéticos se encuentran en
íntima correlación con las glándulas de secreción interna.
En
el laboratorio del organismo humano existen siete ingredientes
sometidos a un triple control nervioso. Los nervios, como agentes de la
ley del triángulo, controlan al septenario glandular. Los tres controles
nerviosos diferentes que interactúan entre sí son los siguientes: primero, el sistema nervioso cerebro-espinal, agente de las funciones
conscientes. Segundo, sistema nervioso simpático, agente de las
funciones subconscientes, inconscientes e instintivas. Tercero, sistema
nervioso parasimpático o vago, quien colabora frenando las funciones instintivas,
bajo la dirección de la mente.
En el sistema cerebro-espinal está ubicado el trono del Espíritu
Divino. El sistema nervioso simpático es el vehículo del Astral.
El vago o parasimpático obedece las órdenes de la mente. Tres rayos y
siete centros magnéticos son la base para cualquier cosmos, tanto en lo
infinitamente grande, como en lo infinitamente pequeño. “Tal como es arriba es abajo”.
Las
siete glándulas más importantes del organismo humano constituyen los
siete laboratorios controlados por la ley del triángulo. Cada una de
estas glándulas tiene su exponente en un chakra del organismo. Cada uno
de los siete chakras se haya radicado en íntima correlación con las Siete Iglesias de la médula espinal. La siete Iglesias de la espina dorsal controlan los siete chakras del sistema nervioso gran simpático.
Las siete iglesias entran en intensa actividad con el ascenso del
Kundalini a lo largo del canal medular. El Kundalini mora en los
electrones. Los sabios meditan en él; los devotos lo adoran y en los
hogares donde reina el Matrimonio Perfecto se trabaja con él
prácticamente, mediante las practicas tántricas de la Magia Sexual.
El Kundalini
es el fuego solar encerrado en los átomos seminales, la sustancia
electrónica ardiente del sol que cuando es liberada, nos transforma en
dioses terriblemente divinos.
Los fuegos del corazón controlan el ascenso del Kundalini por el canal
medular. El Kundalini se desarrolla, evoluciona y progresa de acuerdo
con los méritos del corazón. El Kundalini es la energía primordial
encerrada en la Iglesia de Efeso.
Esta Iglesia se encuentra dos dedos sobre el ano, y dos dedos debajo de
los órganos genitales. La Divina Serpiente de Fuego dormita dentro de
su Iglesia enroscada tres veces y media. Cuando los átomos solares y
lunares hacen contacto en el Triveni, cerca del coxis, despierta el Kundalini,
la serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes. Conforme la serpiente
sube por el canal medular ponen en actividad cada una de las Siete Iglesias.
Los chakras de las gónadas (glándulas sexuales) están dirigidos por Urano, y la glándula Pineal - situada en la parte superior del cerebro - está controlada por Neptuno. Entre este par de glándulas existe una íntima correlación y el Kundalini debe conectarlas con el fuego sagrado para lograr la realización a fondo.
La Iglesia de Efeso
es un loto con cuatro pétalos esplendorosos. Esta iglesia tiene la
brillantez de diez millones de soles. La tierra elemental de los sabios
es conquistada con el poder de esta Iglesia.
El ascenso del Kundalini a la región de la próstata pone en actividad los seis pétalos de la Iglesia de Esmirna. Esta Iglesia nos confiere el poder de dominar las aguas elementales de la vida y la dicha de crear.
Cuando
la serpiente sagrada llega a la región del ombligo podemos dominar los
volcanes, porque el fuego elemental de los sabios corresponde a la Iglesia de Pérgamo,
situada en el Plexo Solar. Dicho centro controla el bazo, el hígado, el
páncreas, etc. Este centro de Pérgamo tiene diez pétalos.
Con el ascenso del Kundalini a la región del corazón, se pone en actividad la Iglesia de Tiatira con sus doce pétalos maravillosos. Esta Iglesia nos confiere el poder sobre el aire elemental de los labios. El desarrollo de ese centro cardiaco confiere inspiración, presentimiento, intuición y poderes para salir conscientemente en Cuerpo Astral, así como también poderes para poner el cuerpo en estado de Jinas.
El capítulo segundo del Apocalipsis versa sobre las cuatro Iglesias inferiores de nuestro organismo. Estos son cuatro centros conocidos como el Fundamental o Básico, el Prostático, el Umbilical y el Cardiaco. Ahora estudiaremos los tres centros magnéticos superiores mencionados por el Apocalipsis en el tercer capítulo. Estas tres Iglesias superiores son: la Iglesia de Sardis, la de Filadelfia y, por último, la de Laodicea.
El ascenso del Kundalini
a la región de la laringe creadora nos confiere al poder de oír las
voces de los seres que viven en los mundos superiores. Este chacra está
relacionado con el Akasha puro. Akasha ese el agente del sonido. El chacra laríngeo es la Iglesia de Sardis. Cuando el Kundalini abre la Iglesia de Sardis, entonces florece en nuestros labios fecundos hecho verbo. El chacra laríngeo tiene dieciséis hermosos pétalos.
El desarrollo completo de este centro Akashico nos permite conservar el cuerpo vivo aún durante las noches profundas del gran Pralaya. Es imposible la encarnación del Gran Verbo sin haber despertado la serpiente sagrada. Precisamente el agente del verbo es el Akasha. Este es al verbo lo que los alambres conductores a la electricidad. El verbo necesita del Akasha para su manifestación.
Akasha es el agente del sonido. El Kundalini es el Akasha. Akasha es sexual. El Kundalini es sexual. El centro magnético donde vive el Kundalini
normalmente es absolutamente sexual, como lo está demostrando el hecho
concreto del sitio donde está situado: dos dedos sobre el ano, y cerca
de dos dedos debajo de los genitales; cuatro dedos en ancho, es el
espacio donde está situado. Sólo es posible despertar el Kundalini y desarrollarlo totalmente con la Magia Sexual, la Ciencia de la Regeneración y encarnación del Verbo. El sexo es el sagrado santuario del Espíritu Santo.
Cuando el Kundalini llega a la altura del entrecejo se abre la Iglesia de Filadelfia. Este es el ojo de la sabiduría. En este centro magnético mora el Padre que está en secreto. El chacra
del entrecejo tiene dos pétalos fundamentales y muchísimas radiaciones
esplendorosas. Este centro es el trono de la mente. Ningún verdadero
clarividente dice que lo es. Ningún verdadero clarividente dice: "yo vi".
El clarividente iniciado dice: "nosotros conceptuamos".
Todo clarividente necesita Iniciación. El clarividente sin Iniciación está expuesto a caer en muy graves errores. El clarividente que vive contando sus visiones a todo el mundo está expuesto a perder su facultad. El clarividente hablador puede también perder el equilibrio de la mente. El clarividente debe ser callado, humilde, modesto. El clarividente debe ser como un niño.
Cuando el Kundalini llega a la altura de la glándula pineal, se abre la Iglesia de Laodicea. Este flor de loto tiene mil pétalos resplandecientes. La glándula pineal es influenciada por Neptuno. Cuando esta Iglesia se abre, recibimos la clarividencia, la intuición, etc.. La pineal está en íntima relación con los chakra de las gónadas o glándulas sexuales. A mayor grado de potencia sexual, mayor grado de desarrollo de la glándula pineal. A menor grado de potencia sexual, menor grado de desarrollo de la glándula pineal. URANO en los órganos sexuales y Neptuno en la glándula pineal se unen para llevarnos a la REALIZACIÓN TOTAL.
En las escuelas de regeneración se nos enseña a trabajar prácticamente con la ciencia de Urano y Neptuno.
El sendero Tau incluye tres
senderos, siendo éste el cuarto. Mucho se ha dicho sobre los cuatro
caminos. Hay que recorrer el cuarto camino con plena
conciencia. Durante el acto sexual transmutamos los instintos brutales
del cuerpo físico a voluntad, las emociones pasionales del astral en
amor, los impulsos mentales en comprensión; y nosotros como espíritus
realizamos la Gran Obra. Así recorremos los cuatro caminos en
la práctica. No necesitamos hacernos fakires para el primer sendero, ni
monjes para el segundo, ni eruditos para el tercero. La Senda del
Matrimonio Perfecto no se permite recorrer los cuatro senderos durante
el mismo acto sexual.
Desde el versículo primero hasta el séptimo, habla el Apocalipsis del centro coxígeo. En este centro está la Iglesia de Efeso. En este centro creador se haya enroscada la Serpiente Ígnea,
tres veces y media. Quien la despierta y la hace subir por su médula
espinal recibe la espada flamígera y entra entonces al Edén.
En
la Serpiente se halla la redención del hombre, pero debemos estar en
guardia contra la astucia de la serpiente. Se debe contemplar la fruta
prohibida y aspirar su aroma, pero recordad lo que dijo el señor Jehová:
“si comieres de ese fruto moriréis” debemos gozar de la dicha
del amor y adorar a la mujer. Un buen cuadro nos arroba, una bella pieza
de música nos lleva hasta el éxtasis, pero una bella mujer adorable nos
da ganas de poseerla en el acto. Ella es la viva representación de Dios
Madre. El acto sexual con la adorada tiene sus delicias indiscutibles.
El gozo sexual es un derecho legítimo del hombre. Gozad la dicha del
amor pero no derraméis el semen. No cometáis sacrilegio. No seáis
fornicario. La castidad no convierte en dioses. La fornicación nos
convierte en demonios.
Krumm Heller, dijo: “Los
setianos adoraban la gran luz, y decían que el sol en sus emanaciones,
forma nido en nosotros y constituye la serpiente”. Los nazarenos
dijeron: 'todos vosotros seréis dioses, si salís de Egipto y pasáis el
Mar Rojo'”. Krumm Heller nos cuenta en su Iglesia Gnóstica
que esta secta gnóstica tenía como objeto sagrado un cáliz en el cual
tomaban el semen de Benjamín. Este, según Huiracocha, era una mezcla de
vino y agua. Dice el gran Maestro Krumm Heller que jamás faltaba sobre
los altares de los nazarenos el símbolo sagrado de la serpiente sexual.
Realmente “la
fuerza, el poder que acompañó a Moisés fue la serpiente sobre la vara
que luego se convirtió en la vara misma. La serpiente fue ciertamente la
que habló a las demás serpientes y la que tentó a Eva”.
El sabio Huiracocha en otro párrafo de su inmortal obra titulada “La Iglesia Gnóstica” dice, “Moisés
en el desierto mostró a su pueblo la serpiente sobre la vara y les dijo
que el que aprovechara esa serpiente no sería dañado durante su
trayecto”. Todo el poder maravilloso de Moisés residía en la serpiente sagrada del Kundalini. Moisés practicó muchísima Magia Sexual para levantar la serpiente sobre la vara. Moisés tuvo mujer.
En
la noche aterradora de los siglos pasados, los sublimes y austeros
Hierofantes de los Grandes Misterios fueron los celosos vigilantes del
Gran Arcano. Los grandes sacerdotes habían jurado silencio, y la llave
del arca de la ciencia se ocultaba a los ojos del pueblo. La Magia Sexual
sólo la conocían y practicaban los grandes sacerdotes. La Sabiduría de
la Serpiente es la base de los grandes misterios. Esta se cultivó en las
Escuelas de Misterios de Egipto, Grecia, Roma, India, Persia, Troya, México azteca, Perú incaico, etc.
Krumm Heller nos cuenta que “en
el canto de Homero a Démeter", encontrado en una biblioteca rusa, se ve
que todo giraba alrededor de un hecho fisiológico-cósmico de gran
trascendencia. En ese arcaico canto de aquel Hombre-Dios, que
cantó a la vieja Troya y a la cólera de Aquiles, se ve claramente la
Magia Sexual, sirviendo de piedra angular al gran Templo de Eleusis. El
baile al desnudo, la música deliciosa del templo, el beso que embriaga,
el hechizo misterioso del acto secreto hacían de Eleusis un paraíso de
dioses y diosas adorables. Entonces nadie pensaba en “porquerías” sino en cosas santas y sublimes.
A nadie se le hubiera ocurrido profanar el templo. Las parejas sabían retirarse a tiempo para evitar el derrame del Vino Sagrado.
En Egipto aparece Osiris, el principio masculino, frente a Isis, el
eterno y adorable femenino. En este país asoleado de Kem, el Señor de
toda perfección trabajó también con el Gran Arcano A. Z. T. 1
Precisamente cuando se hallaba en su periodo de preparación Iniciática
antes del comienzo de su misión. Así está escrito en las memorias de la
Naturaleza.
En Fenicia, Hércules y Dagón se aman intensamente; en Ática, Plutón y
Persephone; pero como dice el doctor Krumm Heller, ya entre ellos se
habla claramente del Phalo y el Útero; “ese es el Lingam-Yoni de los misterios griegos”.
Los
grandes sacerdotes de Egipto, viejos herederos de la sabiduría arcaica
que cultivaron los atlantes, representaron al Gran Dios Ibis de Thot con
el miembro viril en estado de erección, y cuenta Krumm Heller que sobre
ese Phalo erecto de Ibis de Thot, se escribió una frase que decía: “dador de la razón”. Junto a la inscripción resplandecía gloriosamente una flor de loto.
Los viejos sabios del Egipto sagrado grabaron en sus muros milenarios el símbolo divino de la Culebra Sexual.
El secreto de la Magia Sexual era incomunicable. Ese es el Gran Arcano.
Aquellos infelices que divulgaban el secreto indecible, eran condenados
a pena de muerte. Se les llevaba a un patio empedrado, y ante un muro
milenario cubierto de pieles de cocodrilo y jeroglíficos indescifrables,
se les cortaba la cabeza, se les arrancaba el corazón y sus cenizas
malditas eran arrojadas a los cuatro vientos. Nos vienen ahora a la
memoria, Cazote, el gran poeta francés que murió en la guillotina
durante la Revolución Francesa. Este hombre profetizó en célebre
banquete su propia muerte, y la suerte fatal que les aguardaba a cierto
grupo de nobles Iniciados que proyectaban la divulgación del Gran Arcano.
A unos les profetizó la guillotina, a otros el puñal, el veneno, la
cárcel, el destierro. Sus profecías se cumplieron con absoluta
exactitud. En la edad media todo aquel que divulgaba el Gran Arcano
era muerto misteriosamente, ya por las camisas de Nesus, ya por los
jaboncitos envenenados que llegaban como regalo de cumpleaños a la
puerta del condenado, o por los ramilletes perfumados o el puñal.
El Gran Arcano
es la clave de todos los poderes y la llave de todos los imperios. Los
poderes de la Naturaleza se desencadenan contra los atrevidos que
intentan dominarla. Los grandes Hierofantes esconden su secreto, y los
Reyes Divinos no le entregan a ningún mortal la clave secreta de su
poder. Desdichado, infeliz aquel mortal que después de haber recibir el
secreto de la Magia Sexual no sabe aprovecharlo: “a ese más le valiera no haber nacido o colgarse una piedra de molino al cuello y arrojarse al fondo del mar”.
A la Naturaleza no le interesa la realización cósmica del hombre y eso
es hasta contrario a sus propios intereses. Esa es la causa por la cual
ella se opone con todas sus fuerzas ante el atrevido que quiere
dominarla.
Para despertar el Kundalini se necesita la mujer. Empero, debemos advertir que el Iniciado sólo debe practicar Magia Sexual con una sola mujer. Aquellos que practican Magia Sexual
con distintas mujeres cometen el delito de adulterio. Esos no progresan
en estos estudios. Desgraciadamente existen ciertos sujetos que
utilizan la Magia Sexual como un pretexto para
seducir mujeres. Eso son los profanadores del templo. Semejante clase
de hombres caen inevitablemente en la Magia Negra. Advertimos a las
mujeres que se cuiden mucho de esos perversos personajes de la
sexualidad.
Existen también muchas mujeres que, con el pretexto “dizque”
de realizarse a fondo, se juntan con cualquier varón. Esas mujeres
pasionales lo que quieren es saciar sus deseos carnales. El culto
de la Magia Sexual sólo se puede practicar
entre marido y mujer. Aclaramos esto para evitar seducciones y raptos
carnales, y santas lujurias pasionales.
La
Fuerza Sexual es un arma terrible. Los científicos no han podido dar con
el origen de la electricidad. Nosotros afirmamos que la causa de la
energía eléctrica debemos buscarla en la Fuerza Sexual Universal.
Esa fuerza no sólo reside en los órganos de la sexualidad, sino también
en los átomos y electrones del universo. La luz del Sol es un producto
de la sexualidad. Un átomo de hidrógeno se une sexualmente con un átomo
de carbono para producir luz solar. El hidrógeno es masculino. El
carbono es femenino. De la Unión sexual de ambos resulta la Luz Solar.
Muy interesantes resultan los estudios sobre los procesos del carbono.
Esos procesos son la gestación de la luz.
La
causa causorum de la electricidad debemos buscarla en el fuego
serpentino universal. Ese fuego mora en los electrones. Los sabios
meditan en él; los místicos lo adoran, y aquellos que siguen la Senda
del Matrimonio Perfecto trabajan prácticamente con él.
La Fuerza Sexual en manos de Magos Blancos y de Magos Negros,
es un arma terrible. El pensamiento atrae a la espina dorsal el fluido
sexual para depositarlo en su bolsa respectiva. Con el derrame fatal de
ese fluido se pierden billonadas de átomos solares. El movimiento de
contracción sexual que sigue al derrame del semen, recoge de los
infiernos atómicos del hombre billonadas de átomos satánicos que
reemplazan a los átomos solares perdidos. Así es como formamos al diablo
en nosotros.
Cuando refrenamos el impulso sexual en nosotros, entonces el fluido maravilloso que regresa al Cuerpo Astral
multiplicando sus esplendores inefables. Así es como formamos al Cristo
en nosotros. Así pues, con la energía sexual podemos formar dentro de
nosotros al Cristo o al diablo.
El Gran Maestro, en su calidad de Cristo Cósmico encarnado dijo: “Yo
Soy el pan de vida; Yo Soy el pan vivo. Si alguno comiere ese pan,
vivirá eternamente. El que coma mi carne y beba mi sangre, tendrá la
vida eterna y yo le resucitaré. El que coma mi carne y beba mi sangre,
en mí mora y yo en él”.
Cristo es el Alma Solar.
El Espíritu viviente del Sol. Este, con su vida, hace crecer la espiga
del trigo, y en el grano, en la semilla, queda encerrada toda la
potencia del Logos Solar. En toda semilla vegetal, animal o humana, se
halla encerrada como dentro de un estuche precioso, la sustancia
cristónica del Logos Solar.
Haciendo retornar la energía creadora hacia adentro y hacia arriba,
germina, nace dentro de nosotros un niño maravilloso: un Cuerpo Astral
Crístificado. Ese vehículo nos confiere la inmortalidad. Ese es nuestro
Crestos Mediador. Con ese vehículo llegamos al Padre que está en
secreto. "Nadie llega al Padre sino por Mí", dijo el Señor de toda
perfección.
El fantasma astral
que poseen los mortales no es más que un esbozo de hombre. Ni siquiera
tiene unidad. Ese fantasma de fachada es guarida de demonios y de toda
ave sucia y aborrecible. Dentro de ese fantasma astral vive el
yo (el diablo). Este es legión infernal. El yo es legión. Así como un
cuerpo se compone de muchos átomos, así también el yo se compone de
millonadas de yoes. Inteligencias diabólicas, repugnantes demonios que
riñen entre sí. Cuando muere una persona se vuelve eso: “legión”.
En sí misma, la persona se vuelve polvo. Sólo queda viviendo eso.
Legión de yoes. Los clarividentes suelen encontrarse a los
desencarnados, vestidos de distinta manera y simultáneamente en lugares
diferentes. La persona parece haberse vuelto muchas personas. Es legión.
Empero, cuando hemos hecho nacer en nosotros un Cuerpo Astral
Crístico, continuamos después de la muerte viviendo en ese cuerpo
sideral. Somos entonces realmente inmortales. Esa clase de personas que
poseen un Cuerpo Astral Crístificado se hayan después de la muerte con
la Conciencia despierta. Los desencarnados comunes y corrientes viven
después de la muerte con la Conciencia dormida. La muerte es realmente
el regreso a la concepción fetal. La muerte es el regreso a la semilla.
Todo aquel que muere regresa al nuevo vientre materno totalmente
inconsciente, dormido.
La gente ni siquiera tiene encarnada el Alma. El Alma de las personas
está desencarnada. Las personas tienen tan solo encarnado un embrión de
Alma. La gente malvada no tiene ni siquiera ese embrión de Alma. Sólo
poseyendo un Cuerpo Astral Crístificado, podemos encarnar el Alma. La
gente común y corriente es tan sólo vehículo del yo. El nombre de cada
mortal es legión.
Sólo con la Magia Sexual podemos hacer nacer dentro de nosotros el Astral Crístico. La tentación es fuego. El triunfo sobre la tentación es luz. “El
deseo refrenado hará subir el líquido astral hacia la glándula Pineal y
así nace dentro de nosotros el Adán Cristo, el Superhombre”.
Fuente: Avatar Kalki Samael Aun Weor más leves correcciones mías de redacción.
1.- A.Z.T. es una correción al A.Z.F. neognóstico de Aun Weor, quien cometió un error al copiar la información de "Tratado Elemental de Ciencia Oculta" de Dr. Papus. Por otro lado, volviendo a la fuente original, es muy posible que las letras AZT sean la abreviatura del AZoTh (Azoth sería el resultado de la unión de las dos letras con que inicia y termina el alfabeto hebreo: la Aleph y la Thau), que equivale a la Piedra Filosofal o Piedra Cúbica. Esta palabra estaría formada por la primera y última letra de los alfabetos griego y hebreo, significando el principio y final de todo cuanto existe, elemento generador de todo lo manifestado, origen y destino de todo cuanto existe. En relación con la doctrina de Papus y Levi, el Azoth sería el principio creador de la naturaleza, el Mercurio de los Sabios, el Gran Agente Mágico, el cual representa la Luz Astral como vehículo de la vida. Estaría simbolizado por la figura de una Cruz y cada uno de sus cuatro miembros lleva una letra de la palabra Taro, que puede leerse también Rota, Ator y en muchas otras combinaciones, cada una de las cuales tiene un significado oculto.